¿Conoces la forma en qué duermes? Posturas para un sueño reparador

 

Para descansar de forma reparadora no solo necesitas comer algo ligero en la noche, alejarte de las pantallas y estar en un ambiente totalmente oscuro. La posición en la que duermes es determinante para cuidar tu cuerpo y recuperarte del estrés del día. 

 

Juan Pablo Tobón, instructor del CAPF Comfama, te muestra cómo lograr que tu postura favorita esté en armonía con tus articulaciones, huesos y músculos.

 

     – De lado

 

 

– Acomoda una almohada entre tu hombro y tu cabeza, para que tu columna quede recta y tu cuello no se lastime. Tus brazos deben descansar sobre la almohada.

– Pon otra almohada entre tus piernas, para que tu cadera permanezca firme.

 

 

     – Boca arriba

 

 

 

– Apoya la cabeza sobre una almohada mediana, para que tus cervicales no se fuercen y tu columna quede completamente recta.

– Pon otra almohada debajo de tus rodillas, para que tu zona lumbar no se curve más de lo       normal.

– Si sufres de apnea del sueño, evita esta postura, pues la gravedad puede comprimir el paso del aire por tus vías respiratorias.

 

     – Boca abajo

 

 

 

– Acomoda tu almohada bajo tu abdomen y pelvis, para que tu zona lumbar descanse y la posición de tu espalda sea lo más natural posible.

– Esta es la postura menos recomendada, pues implica que gires la cabeza a un lado, forzando las cervicales. También aumenta el ángulo entre los pies y las piernas, lo cual causa lesiones a largo plazo.

 

Recomendaciones para tener en cuenta:

 

Nuestro cuerpo tiene un reloj biológico que se construye a partir de nuestros hábitos y rutinas, se ajusta a los diferentes cambios y comportamientos del cuerpo en el día.

Cuando modificamos factores tan importantes como dormir, agredimos todo el orden que nuestro cuerpo había generado para repararnos y ajustar el metabolismo.

 

Presta atención a estos consejos:

 

– Tratar de establecer un horario fijo para hacerlo.

– Evitar la cafeína y la nicotina.

– Realizar actividad física durante el día, evitar hacerla 2 o 3 horas antes de dormir.

– Mantener buenos hábitos alimenticios.

– No comer ni beber demasiado líquido en la noche.

– No tener alrededor electrodomésticos o aparatos electrónicos encendidos.

– Propiciar un espacio tranquilo y cómodo para hacerlo.

– Evitar distractores como radio, celulares, televisores.

– Tener una actitud dispuesta a descansar, evitando los pensamientos y preocupaciones

– No realizar siestas después de las 3 de la tarde.

 

En los adultos es necesario dormir entre 7 y 8 horas para que nuestro cuerpo descanse totalmente y pueda reparar y reemplazar todo aquello que gastamos en el día.

Estar sano comprende cuidar la salud desde todas sus dimensiones, encontrando un equilibrio en nuestros hábitos, rutinas y darle al cuerpo la posibilidad de recargarse para empezar los retos que trae un nuevo día.

 

 

¡Tenemos algunas invitaciones para ti!

 

En el CAPF digital Comfama te ofrecemos clases para enseñarte más sobre cómo lograr un sueño reparador. También tenemos cursos para cuidar tu mente y tu cuerpo, alimentarte mejor y mejorar tu calidad de vida.

 

¿Quieres conocer más sobre nuestros planes y programas?

Haz clic aquí

 

¿Te gustaría saber si sufres de insomnio?

Descúbrelo aquí en uno de nuestros Podcast Vitas

 

 

Fuentes:

– https://www.comfama.com

– https://www.who.int

 

 

Leave Comment