El próximo 15 de septiembre es el día mundial del linfoma, un tipo de cáncer que se desarrolla en el sistema linfático.
En Vitas creemos importante que conozcas sobre esta enfermedad ya que según cifras del Instituto Nacional de Cancerología ocupa entre el séptimo y noveno lugar dentro de los tipos de cáncer más frecuentes en Colombia.
¿Entonces, qué son los linfomas?
Son un tipo de cáncer que afecta el sistema inmunológico. Para ser más exactos es un cáncer en los linfocitos, que son un tipo de glóbulo blanco de nuestra sangre.
Hay diferentes tipos de linfomas según las células linfáticas infectadas, los dos principales son:
- Hodking: Se desarrolla en el sistema linfático, y se origina cuando las células sanas de este sistema cambian y crecen sin control. Ésta forma de crecimiento descontrolado origina la formación del tumor.
- No Hodking: Se encuentra también en el sistema linfático. Es un poco más común, pero presenta varios subtipos con pronósticos distintos.
¿Cuál es la diferencia entre ambos?
La diferencia principal entre ambos radica en las células malignas infectadas. Para saber el tipo de linfoma es necesario realizar una biopsia y una evaluación microscópica y muy detallada de las células cancerígenas.
¿Sabes qué es el sistema linfático, y cómo funciona? Aquí te contamos
El sistema linfático es una red de tejidos y órganos que funcionan de forma similar al sistema circulatorio, con la gran diferencia de que no es un sistema cerrado. Por el contrario se inicia en los tejidos corporales y finaliza en nuestra sangre.
Está conformado por:
- La linfa: Es un líquido compuesto de glóbulos blancos, proteínas y otras sustancias como grasas y sales. Se transporta desde los tejidos corporales hasta la sangre, a través de los vasos linfáticos.
- Vasos linfáticos: Son conductos similares a las venas y a través de ellos se transporta la linfa y sustancias que no pueden ir por la sangre debido a su tamaño.
- Ganglios linfáticos: Son un grupo de células y linfocitos que hacen parte de nuestro sistema inmunitario. Ellos son del tamaño de un frijol y se encuentran por todo nuestro cuerpo. Ayudan a filtrar y a combatir las infecciones y enfermedades.
¿Y cuáles son las causas?
En la gran mayoría de casos se desconocen las causas que originaron este tipo de cáncer. Sin embargo los linfomas se pueden desarrollar en personas con sistemas inmunitarios débiles. Pueden ser personas que hayan recibido un trasplante de órganos o infección por VIH. También se han presentado casos producidos por exposición a radiación y herbicidas.
¿Y los síntomas?
Los síntomas cambian según el tipo del linfoma y dónde se encuentre localizado. Sin embargo pueden incluir:
- Agrandamiento de los ganglios linfáticos.
- Perdida injustificada de peso.
- Fiebre y sudoración repentina.
- Picazón generalizada.
- Fatiga constante.
- Hinchazón en alguna parte del cuerpo.
- Pérdida del apetito.
- Sudoración nocturna desmedida.
Prevención
Cómo lo mencionamos anteriormente, en muchas ocasiones no hay un factor que haya originado la formación del linfoma, por esta razón es difícil saber qué tipo de tratamiento o qué acciones pueden prevenirlo.
Sin embargo puedes seguir estas recomendaciones:
- Cuida tu alimentación y controla tu peso: Algunos estudios han determinado que personas con obesidad son más propensas a desarrollar este tipo de enfermedades. Por esta razón hay que evitar el consumo excesivo de grasas y además tener una alimentación saludable y balanceada.
- Evitar contraer infecciones: Es necesario evitar relaciones sexuales que pongan en riesgo tu salud, pues esto debilidad tu sistema inmune para defenderte de cualquier enfermedad.
- Evitar padecer de gastritis: La bacteria Helicobacter Pilory puede relacionarse con un tipo de linfoma en el estómago. Por esta razón debes evitar consumir alimentos contaminados, comer sano, saludable y en horas determinadas.
- Realizar ejercicio: No es un cliché, la actividad física realmente ayuda a los sistemas de cuerpo a que se mantengan saludables.
- Dormir y descansar lo suficiente: El sueño es el único espacio de tu cuerpo para repararte, descansar y regenerarte. Por esta razón es necesario que duermas bien entre 7 y 8 horas diarias.
- Evitar el estrés: Es muy sencillo decirlo y complicado aplicarlo, pero nuestro cuerpo y emociones están en completa sincronía. Por esta razón debes huirle al estrés y además debes tratar de manejar adecuadamente algunas situaciones de tu vida.
Invitación
En Vitas creemos que el cuidado de la salud debe ser abordado desde diferentes perspectivas y una de ellas es el conocimiento. Si leemos y conocemos un poco de algunas enfermedades, y si aprendemos también a reconocer las señales del cuerpo cuando se está enfrentado a una enfermedad podremos tener diagnósticos a tiempo.
Te invitamos a que leas, escuches, consumas conocimiento. Nunca está de más aprender algo nuevo para ayudar a los demás e incluso a nosotros mismos.
Fuentes
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